No me es sencillo escribir ni mucho menos hablar. La verdad es que muchas veces me es demasiado natural el hacer estas dos cosas, pero ahora pasa esto y me cuesta una enormidad asumir lo que en realidad me sucede…
La verdad omití muchas cosas que pensaba no eran las correctas para mi, esa racionalidad innata que siempre me hizo pensar gran parte de mis decisiones de una manera fría, de una manera en que las cosas no me dolieran. Es eso lo que en el fondo ahora no me permite seguir avanzando.
Siempre, de alguna manera desee el arreglar las cosas, no solo contigo, sino también con otro millón de cosas que sucedían a mi alrededor, porque sentía era algo que si podía realizar, que en el fondo muchas cosas aun no estaban perdidas mientras tuviera el valor de remediar mis propios errores, pero obviaba esa realidad y lo que de alguna forma quería… evadía mis ansias, mis carencias, mis temores, mis valores y hasta mi propio orgullo, evadía la herida que llevaba abierta, creo, esperando a que el tiempo la cierre.
Me reuní con mis amigos, les preste esa atención que de alguna forma se perdió con el tiempo, comenzamos a hablar, a salir, nos volvimos a ayudar, a escuchar, lo pasamos bien. Comencé a estudiar, conocí gente nueva, volví a fumar, me reencante con la cerveza y después de mucho logre encontrar otra vez ese espacio que era único para mi, silencio, le puse atención al tiempo (ahora corría mas rápido), volví a consumir mi necesidad por la música a disfrutar del cine en soledad, si hasta me anduve portando mal, aunque ya no era lo mismo. Lo pase muy bien, aun lo hago.
Por todo este tiempo logre callar mi cabeza y algo mas, me olvide que existían cosas, momentos, sabores, sensaciones, ¡personas! que quería aun conmigo, me engañaba, solo vivía mi día y lo intentaba hacer de la mejor forma posible, intentaba atibórrame con lo que sea, consumir el tiempo, mi día, lo mas rápido que fuera posible y siempre con los audífonos en mis oídos. Me evadía…
Hace un par de días despierto y por alguna extraña razón vuelvo a mirar atrás, recordé cada uno de nuestros encuentros después de y las distintas sensaciones que ello me provocaba. Me senté y me quede pensando en realidad lo mucho que te extraño y el porque jamás hice algo para hacerte cambiar de opinión.
Ese día en mi cama lo supe, no era solo “eso”, ¡eras tú!, y te lo dije, me sorprendió mucho esa sensatez con la que respondiste que las cosas no podían ser, que había mucho que perder, porque muchas cosas no iban a cambiar en nosotros, que el tiempo decida, etc. Te encontré la razón y continuamos con nuestros caminos otra vez.
Hoy las cosas fueron diferentes para mí, no intente obviar ese submundo latente en mi esta vez, no puedo seguir negándome sin entender a cabalidad lo que quise o lo que quiero. Pensé, pensé, solo para descubrir, que hasta cierto punto no me encontraba tan mal, me desahogue de una forma muy difícil de entender y mucho más de explicar, ¡me sentí bien!, me sentí bien por el simple hecho de que aquel día hice a un lado todo aquello que pensé estaba mal para mi, me descubrí completamente vulnerable, dije lo que sentía, lo que quería, por primera vez no tuve miedo, la verdad no me importaba el resultado de ello, no tenia nada que perder…
Me descubrí sin miedo, libre, deje de pensar en lo que podría perder y me enfoque solo en lo que en realidad quería para mi, deje de excusarme con las trivialidades que pueden llegar a ser tu entorno tanto como el mío, esas circunstancias que te hacen pensar que en realidad muchas cosas no importan, que el vivir para los demás no te llena, no me conformo solo con dejarte ir por no ser capaz de cambiar ciertas cosas, de sobrellevar mis ánimos, mis inquietudes, mi orgullo, mis amigos o mi estilo de vida, no me excuso, puedo ir mas allá, porque soy capaz de llevar todo eso conmigo sin descuidar en lo absoluto lo que en realidad quiero, quererte ya no me juega en contra, es lo que es, esta en mi y no me puedo callar ante ello, es un “pro”. Entendí que muchas cosas pueden ser realidad si pierdes el miedo que no te permite a atreverte, a intentar realizar algo que en fondo quieres, te puedes caer, puedes sufrir, te pueden decir que no, pero lo intentaste y eso lo hiciste tu, por ti y por nadie más y hay que sentirse orgulloso por ello, no puedes conformarte con pensar lo que pudo ser sin haberlo intentado.
No escribo esto pensando que cambiare tu mundo, ni mucho menos con la intención de hacerte cambiar de opinión respecto a nosotros, escribo esto para cerrar este ciclo, si bien mi herida aun no cierra y mis sentimientos por ti no han cambiado. Sé las cosas no serán de otra forma, entendí que el intentar hacer las cosas bien aunque sea tarde, me basta, le perdí el miedo a pensar, es lo que debí hacer desde un principio y es en el fondo lo que no te permite cometer éstos errores. Que el evadir lo que siento esta mal, que callar lo que quiero decir también lo ésta, ahora recién lo entiendo y te juro me siento mejor…
Espero con esto, también seas capaz de enfrentar tus propios miedos, alguna vez te dije: “que estabas muy ocupada pasándolo bien”, me refería a esto, a lo que estas haciendo ahora y como, de que manera se refleja en ti, supongo te sienta bien, sé es lo mas cómodo que puedes hacer, yo hago lo mismo, espero entiendas el significado de esto.
Ahora es el momento de seguir adelante, ahora si puedo continuar, encontré un nuevo valor en mi, espero no te moleste si tomo mi distancia, la verdad no te quiero perder, pero aun no soy capaz de llevar una amistad madura, sincera y responsable, no contigo, aun no. No quiero caer mas en ese juego, es fácil y conveniente hasta cierto punto, pero no quiero ser un Diego más… (No te lo tomes a mal, es solo un ejemplo, no siempre estaré ahí esperando, no me puedo hacer el wn con lo que siento, a eso me refiero), en serio seguiremos hablando y todo, quizás alguna película de vez en cuando, no se… ¡eso lo decides tu, no el tiempo!
No tengo más que decir, en serio me siento más tranquilo, puede que las cosas entre nosotros cambien como puede que no, el punto de esto es que soy el mismo, que continuare haciendo lo de siempre, aunque creo, ya no cometeré los mismos errores otra vez. Solo sigo adelante.
No hay comentarios:
Publicar un comentario